La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica autoinmune en la que la inflamación de las vainas de mielina provoca una degeneración progresiva del Sistema Nervioso Central (SNC).
La esclerosis múltiple genera un proceso inflamatorio y degenerativo de las vainas de mielina que rodean a los axones encargados de la transmisión de los impulsos nerviosos desde las neuronas hasta distintos músculos, glándulas, órganos, etc.
Como resultado, su deterioro ocasiona diferentes alteraciones de las funciones cerebrales, provocando diversos signos y síntomas característicos de la esclerosis múltiple.
Síntomas esclerosis múltiple
El cuadro clínico de la esclerosis múltiple muestra una gran variabilidad de síntomas. Suelen observarse alteraciones neurológicas que afectan a las áreas motoras, visuales y sensoriales.
En torno a un 85% de los pacientes no muestra un desarrollo constante de la enfermedad, sino que ésta transcurre en de episodios de déficit o brotes y su posterior remisión, seguidos por momentos de sintomatología más aguda y exacerbada.
Tipos de síntomas de la esclerosis múltiple
Los síntomas propios de la esclerosis múltiple se clasifican en función de su relación con la afectación axonal.
Se clasifican en:
- Síntomas primarios: surgen de forma directa tras la desmielinización del SNC.
- Síntomas secundarios: son consecuencia de los síntomas primarios.
- Síntomas terciarios: consecuencia de las dificultades de participación social originadas por la enfermedad.
Síntomas primarios
Entre los síntomas más directos de la esclerosis múltiple suele observarse: debilidad muscular e incoordinación. Alteran la consecución de movimientos voluntarios y necesarios para garantizar la funcionalidad y la supervivencia vital.
Este tipo de síntomas generan alteración de marcha, alteración vesical e intestinal y de otras funciones vitales imprescindibles como la respiración y la deglución.
Otros síntomas primarios son la alteración de la sensibilidad y la afectación visual, diplopía y nistagmo, ocasionando un problema de recepción de estímulos sensoriales necesarios para reconocer el entorno y garantizar la supervivencia.
Además, suele observarse una disfunción cognitiva y síntomas de fatiga, uno de los signos más frecuente en pacientes con esclerosis múltiple.
Se estima que su prevalencia es entre el 70% y el 92% y afecta de forma negativa en las actividades funcionales de la vida diaria de los pacientes.
Síntomas secundarios
Otras alteraciones secundarias como la depresión y la ansiedad pueden suponer una consecuencia directa de la afectación axonal, dificultando o incluso impidiendo al paciente con esclerosis múltiple que realice actividades necesarias en su día a día.
Como resultado, este tipo de síntomas suele generar los síntomas terciarios.
Síntomas terciarios
Existen síntomas de la esclerosis múltiple que debido al impacto significativo que producen sobre el paciente, afectan directamente a su desempeño social, laboral y familiar.
Como consecuencia, todo ello influye de manera directa sobre la persona y genera la dependencia funcional del paciente provocando su aislamiento social.
Rehabilitación esclerosis múltiple
El programa de rehabilitación integral de la esclerosis múltiple tiene como objetivo principal ayudar al paciente en el desempeño de sus tareas diarias y mantener su independencia funcional.
De hecho, los estudios realizados con adultos estiman que un tratamiento temprano previene los efectos de la enfermedad y retrasa su deterioro.
Desde las clínicas de rehabilitación neurológica Neuron trabajamos a partir de un tratamiento interdisciplinar y específico para cada paciente, no solo a partir de la identificación de los síntomas presentes, sino también de forma más específica para reconocer cómo éstos afectan en el día a día de los pacientes y cómo poder emplear las áreas no comprometidas para conservar la calidad de vida de las personas con esclerosis múltiple más tiempo.
Raquel Gutierrez-Cabello
Logopeda Neuron Madrid Río