Adaptaciones del líquido y el alimento en personas con disfagia

¿A quién no le gusta relacionarse con su familia o amistades quedando a tomar un café o una cerveza? Parece una tarea simple, pero puede ser muy complicada para algunas personas si sufren ciertas patologías neurodegenerativas, tumores cerebrales, traumatismos craneoencefálicos o ictus.  

Si se presenta alguno de estos signos sería recomendable ser valorado por un logopeda: dolor o imposibilidad de tragar, sensación de cuerpo extraño en la garganta, babeo, ronquera, regurgitación, pérdida de peso, tos o moqueo durante la ingesta o después de ella.  

Si tras la valoración se precisa de un tratamiento, puede que se mande una serie de adaptaciones en los alimentos. 

 A continuación, se van a hablar de las diferentes texturas:

Hay que tener en cuenta que las adaptaciones de la textura se suelen hacer con el uso del espesante, no todos son iguales. Por lo que, hay que mirar en los botes las indicaciones para las diferentes texturas que se han nombrado en el esquema. 

En estas imágenes, se observa como quedaría el agua espesada en las diferentes adaptaciones: 

Las adaptaciones que puede presentar un alimento tanto liquido como sólido, no solo se basan en la viscosidad, sino también en la cantidad. Hablaríamos de la cantidad de sólido o líquido que entre en una cuchara. 

La adaptación de las comidas es de vital importancia para una alimentación segura y eficaz. Es por eso, que debemos conseguir que cada plato tenga la consistencia y el volumen adecuados para la persona con disfagia.  

Tener disfagia no significa tener que comer solo puré. Actualmente, existen adaptaciones que pueden ayudar a obtener los resultados deseados, creando unos platos atractivos a la vista y con sabores que creíamos no volver a probar.  

Hay varias técnicas que pueden ser de gran ayuda para modificar la textura de los alimentos.  

Dentro de esos métodos, encontramos los geles resistentes a la saliva que ayudan a conseguir una textura (tipo flan), esto permite convertir los líquidos en texturas con una estructura semisólida a base de químicos gelificantes. 

Otros métodos usados, son los aires y las espumas. Los aires son una técnica que consiste en un componente químico que hace que cuando entra el aire en el alimento produzca un efecto de burbujeo, causando que se mantengan los sabores en la boca durante un periodo corto de tiempo.  

Por otro lado, tenemos las espumas, esta técnica se realiza con la ayuda de un sifón creando una textura similar a la de un mousse. 

Según las necesidades de cada persona encontramos cuatro tipos de dietas: 

• Dieta basal: se utilizaría en personas sin alteraciones. Se incluye cualquier textura y consistencia. 
• Dieta blanda: alimentos que se pueden aplastar, pero la textura es homogénea.  
• Dieta de fácil masticación: alimentos blandos que puedan partirse. Si es necesario se hará uso de salsas espesas. 
• Túrmix: purés en su consistencia necesaria, ya sea néctar, miel o pudding.  

Para obtener un alimento adecuado para la alimentación se puede: 

• Trocear el alimento en pequeñas cantidades. 
• Aplastar con el tenedor alimentos como las patatas. 
• Crear un plato con alimentos variados. 
• Usar cubiertos más pequeños para coger menor cantidad en cada bocado. 
• Procurar masticar el alimento lo suficiente para producir un bolo homogéneo. 

• Tras introducir el alimento a la boca dejar el cubierto en la mesa hasta que haber tragado el trozo anterior. 
• En caso de triturar el alimento, trata de conseguir una misma consistencia y que sea jugoso 
• Se pueden utilizar salsas espesas como la mayonesa para conseguir una textura menos seca y más uniforme. 
• Saborear la comida y disfruta cada bocado. 

Algunos de los alimentos recomendados para las personas con problemas de deglución son los siguientes: 

CONSEJOS

• Procurar crear un ambiente relajado sin distracciones (TV, ruidos).
• No temporizar las comidas, es preferible comer menos cantidades en momentos dispersos que un único plato en gran cantidad.
• Si utilizas prótesis dentaria, ésta debe estar en buen estado y bien colocada antes de empezar a comer.
• Comer sin prisas, haciendo una pausa entre cada cucharada para asegurarnos haber deglutido totalmente el bocado anterior.
• La fatiga es un enemigo a tener en cuenta, ya que puede facilitar que aparezcan atragantamientos y problemas atencionales que dificulten la deglución.
• Es muy importante mantener una postura de 90 grados durante la alimentación, si damos de comer a una persona, ofrecer el alimento desde una misma altura y nunca desde una postura superior a la persona que reciba la comida.
• Mantener una correcta higiene postural previa y posterior a las comidas para evitar infecciones respiratorias comunes en episodios de disfagia (neumonías aspirativas).
• Después de comer mantener una postura de 90 grados durante al menos una hora para evitar reflujos o aspiraciones de restos de alimento que queden en vía oral.
• Mantener una buena higiene bucal después de cada comida para evitar la presencia de restos de alimentos que puedan ser aspirados.

Es importante, como se ha mencionado anteriormente, que, si presenta algún síntoma de disfagia o de alteración a la hora de masticar, se contacte con un logopeda para que se le realice una valoración y un posible tratamiento.  

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