La recuperación de un ictus, también conocido como accidente cerebrovascular en personas mayores, depende de la gravedad del mismo, la salud general del paciente antes del evento, y la rapidez y calidad de la atención recibida.
Puntos claves para la recuperación de un ictus en personas mayores
De los puntos clave sobre la recuperación de un ictus en personas mayores tienes que saber lo siguiente:
Evaluación inicial y tratamiento agudo:
- Tiempo: El tratamiento temprano es crucial. El uso de tratamientos como la trombólisis (para disolver coágulos) puede ser efectivo si se administra dentro de las primeras horas después del ictus.
- Hospitalización: Los pacientes generalmente son hospitalizados para monitoreo y tratamiento inicial. Esto puede incluir medicamentos para prevenir otro ictus, controlar la presión arterial y manejar otros factores de riesgo.
Rehabilitación temprana:
- Inicia en el hospital: La rehabilitación suele comenzar en el hospital con fisioterapia, terapia ocupacional y logopedia (terapia del habla y lenguaje) y desde el área de neuropsicología para el tratamiento cognitivo y emocional del paciente mayor.
- Equipos multidisciplinarios: Los equipos suelen incluir médicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, logopedas, neuropsicólogos, además de enfermeros especializados en rehabilitación neurológica. En Neuron contamos con un equipo formado y altamente especializado para abordar a estos pacientes.
Rehabilitación post-hospitalaria:
- Red de clínicas Neuron: Muchos pacientes con inquietud y necesidades específicas acuden a nosotros por el reconocimiento y aconsejados por profesionales del sector. En Neuron contamos con un equipo formado y altamente especializado para abordar a estos pacientes, con terapias individuales, robótica y últimas tecnologías y programas de intensidad, sobre todo para los casos agudos.
- Rehabilitación intensiva con ingreso: Neuron Las Mercedes es el recurso idóneo, por la tranquilidad que les da a las familias y la garantía de contar con el mejor equipo técnico y humano para alcanzar el máximo nivel de recuperación funcional.
Factores que afectan la recuperación:
- Edad: Los ancianos, personas adultas mayores como hacen referencia a éstas en países latinoamericanos, pueden tener una recuperación más lenta, pero la edad avanzada no significa que la recuperación no sea posible.
- Condiciones de salud preexistentes: Problemas como diabetes, hipertensión y enfermedades cardíacas pueden complicar la recuperación.
- Apoyo familiar y social: Un entorno de apoyo puede mejorar significativamente los resultados, ayudando con la motivación y la adherencia a la rehabilitación.
Aspectos emocionales y psicológicos:
- Depresión y ansiedad: Estos son comunes después de un ictus y pueden afectar la recuperación. Es importante abordar estos problemas con un profesional de salud mental.
- Terapia cognitiva: Puede ser necesaria si hay problemas de memoria, atención o juicio.
Prevención secundaria:
- Cambios en el estilo de vida: Modificaciones en la dieta, ejercicio regular y dejar de fumar son cruciales para prevenir otro ictus.
- Medicamentos: Los médicos suelen recetar medicamentos para controlar factores de riesgo como la presión arterial, el colesterol y el azúcar en sangre.
Pronóstico:
- Varía ampliamente: Algunos ancianos pueden recuperar una gran parte de su independencia, mientras que otros pueden necesitar ayuda constante. El pronóstico depende del tipo y la extensión del daño cerebral, así como de la rapidez y la eficacia de la rehabilitación.
En resumen, aunque la recuperación de un ictus en pacientes mayores puede ser un proceso largo y complicado, con el tratamiento adecuado y el apoyo necesario, muchos pueden mejorar su calidad de vida y recuperar al menos parte de su independencia. Ponerse en buenas manos es la mayor garantía para recuperar la autonomía, la independencia y la autoestima.
